martes, 22 de noviembre de 2011

Cuidado con Marruecos

Los tiempos en las maratones se están revolucionando y no sólo Kenia acapara el protagonismo. Paso a paso, sin llamar demasiado la atención pero con resultados muy prometedores, Marruecos se prepara para dar un golpe firme sobre la mesa en los Juegos Olímpicos de Londres.

Como quien no quiere la cosa, Abdellah Tagharrafet se presentó en la maratón nocturna de Bilbao (22 de octubre); era su segunda maratón (antes había corrido en San Petersburgo en 2h14'12") y empezó a trotar a un ritmo vertiginoso; la liebre quedó rebasada en los primeros kilómetros de carrera y el atleta pasó la media en unos estratosféricos 1h02'28". Es lógico que no podía mantener el ritmo pero él solo fue capaz de terminar en 2h08'21" (casi 11 minutos de ventaja sobre el segundo clasificado) y acercarse a menos de 3 minutos del récord nacional (2h05'27" de Jaouad Gharib, hechos en la prestigiosa maratón de Londres).

Unas semanas más tarde (13 de noviembre), en la clásica maratón de Atenas, Abdelkerim Bubker rompió la hegemonía keniana y se quedó a menos de un minuto del récord del circuito: los 2h10'55" del campeón olímpico Stefano Baldini en 2004. Era su segunda maratón y mejoró su marca personal hasta 2h11'40".

Y para terminar, el mismo día que la maratón de Atenas pero en Turín, Ennaji el Idrissi venció en la maratón italiana con 2h08'13". La marca, que podría pasar por "no espectacular", tiene un poco de jugo detrás. Al parecer, Ennaji había ganado tres semanas antes en la maratón de Casablanca con 2h12'55" y estuvo acompañado hasta el kilómetros 40 en Turín, donde decidió acelerar y marcar un mil a 2'48" para conseguir la victoria.

El Idrissi ganando la maratón de Turín; foto del diario LA STAMPA.

Quizá estas marcas están lejos de los registros sub-2h04' que acreditan algunos kenianos, pero parece que Marruecos también quiere formar parte de la revolución del asfalto. Veremos cómo acaba esto y quién consigue la medalla de oro en Londres.

lunes, 14 de noviembre de 2011

La Behobia (así salió)

Las expectativas eran altas y las ganas, todavía más. Quedar tercero hace dos años me permitía soñar y que ninguno de mis verdugos (ni Chema ni Rafa) estuviera en la línea de salida, me dio alas. Unas alas que me jugaron una mala pasada.

Empecé fuerte y sin quererlo me encontré tirando del grupo. Me fui animando y me separé unos metros, luego me cogieron, fuimos juntos un rato, volví a acelerar, y se repitió la tónica en varias ocasiones. Notaba que me estaba esforzando demasiado, pero me lo estaba pasando muy bien; estaba disfrutando mucho con la carrera, con los rivales y con el público. Pero en algún momento decidí aflojar; era necesario ceder un poco para poder correr después y así lo hice, pero aflojé demasiado o demasiado tiempo o las dos cosas, porque aunque me noté con fuerzas al final, ya no alcancé a nadie de los que ma habían pasado.

Fue una carrera rara, con sensaciones contrarias durante toda ella. Me desanimé bastante (hice casi un minuto más que hace dos años, con la lluvia que cayó ese día), pero a la vez estaba contento porque no hice un mal resultado. Por un lado quería correr bien y demostrarme a mí mismo que estoy listo para la maratón de Castellón, pero por otro lado Asier (el gran Asier Cuevas) me felicita por no haber tenido un buen día. Según Asier, la Behobia es una carrera demasiada dura para colocarla delante de una maratón: si te sale bien la Behobia, llegas fastidiado a la maratón. Si es así, me alegro de haber "fracasado" en San Sebastián; lo arreglaré en Castellón.

De todos modos, el fin de semana resultó exitoso. Hace dos años el tiempo no acompañaba y la tarde del sábado la pasé entre chocolate con churros y pintxos, pero este año me quedé sin chocolate (los pintxos: de foie, de berenjena, de gambas y unos pimientos morunos). Tuve animación en puntos estratégicos, como en el alto Miracruz (km. 17), pero me faltó un fan en Lezo (km. 11); mi fotógrafo favorito me esperó en el puente del Kursaal y mi familia del norte (ahora con un miembro más) se preocupó de arroparme y de animarme desde el momento en que llegué a meta.


¿Qué más se le puede pedir a esta carrera? Supongo que una txapela es lo que más ambiciono, pero hay años para este pequeño detalle. Por ahora, a esperar un año más y disfrutarla de nuevo (quizá acompañado).

Puedes consultar las clasificaciones, aquí.

viernes, 11 de noviembre de 2011

La Behobia

Este domingo se celebra la clásica Behobia-San Sebastián; en el Diario Vasco me nombran entre los favoritos y en este vídeo podéis ver el recorrido en tres dimensiones.


Dicen los organizadores que podremos tener rachas de viento de hasta 40km/h, una temperatura de 18 a 20ºC y nubes, pero sin lluvia. No está nada mal, si lo comparamos con lo que pasó hace dos años.


La foto, de Sergio Fanjul.

martes, 8 de noviembre de 2011

Algo falla

Como os decía hace una entradas, la temporada de atletismo se ha iniciado el pasado 1 de noviembre y con ella los cambios de club de algunos atletas. Yo sigo, por tercera temporada consecutiva,en el C.A.Laietània de Mataró, pero Alessandra Aguilar ha cambiado su F.C.Barcelona por el nuevo club Clínica Dental Seoane-Pampín. Con ella se ha marchado Cristina Jordán y aquí hay una pequeña nota en Marca que lo anuncia.

Desconozco las cantidades del fichaje, pero Alessandra acaba de terminar en 2h33'08" la maratón de Nueva York (14ª), en lo que supone la mejor marca de una española en esa carrera y confirmando su clasificación para los Juegos Olímpicos de Londres, y no he conseguido encontrar ninguna imagen de la corredora gallega con su nuevo club. La mayoría de noticias relacionadas con la carrera hablan del excelente resultado de Geoffrey Mutai (2h05'05") y, en caso de adjuntar una foto ésta es para el vencedor. Y lo mismo, o peor, resultó con la televisión; aquí lo noticiable fue que un corredor se arrodilló frente a una chica del público (su prometida) y le propuso matrimonio (que aceptó).

Es cierto que la maratón de Nueva York es mucho más que una carrera, pero algo falla si los vencedores no consiguen ser la parte más importante de la noticia. Quizá no es fallo de la RFEA, pero la imagen que acompaña en su web a la noticia del resultado de Alessandra tampoco es de su nuevo club; corresponde al campeonato de Europa de 2010. 


Hace años, los futbolistas se inventaron las ruedas de prensa y ahora no hay periodista que se las pierda y saque a relucir lo que allí se cuenta. Es muy cierto que en atletismo no tenemos el mismo gancho (las ruedas de prensa también se hacen, pero casi nadie les sigue), así que deberíamos empezar desde más abajo e, incluso, picar piedra: tener un book de fotos actualizado (nuevo club, nuevo patrocinador...), redactar las noticias que sean importantes y mandarlas a los medios. Me pregunto si la clínica dental Seoane-Pampín ha pensado en esto, pero mucho me temo que su gestión es simplemente que Alessandra y Cristina lleven su publicidad en la camiseta. Y así se les van a escapar grandes oportunidades como la carrera de Alessandra en la gran manzana. Solemos quejarnos que el atletismo anda falta de patrocinadores pero ¿qué hacemos para remediarlo?

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Behobia Light

La federación española de atletismo (RFEA) sigue haciendo de las suyas. El penúltimo invento fue el carnet del corredor; ahora presenta un pulso más agresivo con los organizadores: cada atleta que participe en una carrera incluida en el calendario nacional deberá pagar un canon de 3€ a cambio de nada (bueno, de llenar las arcas de la federación).

Las reacciones no se han hecho esperar y varias pruebas, entre ellas la famosa Behobia-San Sebastián, han decidido salir del calendario de la federación. ¿Qué implicaciones tiene no estar en el calendario de la federación? Básicamente sólo una: los atletas que disfruten de una beca de dicha federación tienen prohibido participar. En el caso de la Behobia, deja de existir el duelo Rafa-Chema y, aunque pone más a tiro de los segundones el conseguir una victoria o un lugar en el podio, éstos tendrán menos valor. Y por si fuera poco, es posible que la victoria final no sea para un español (corren tres etíopes de la zona de Wukro, donde colabora desde hace años el padre Angel Olaran).

Es cierto que el atletismo de nivel está en horas bajas, pero estas políticas de la federación no creo que sean la mejor salida. Yo, como no tengo beca, correré la Behobia 2011, pero reconozco que será una Behobia Light y creo que la culpa no es de los organizadores.