jueves, 26 de abril de 2012

La difícil selección de Kenia

En una semana llena de fútbol (todas lo son, pero entiendo que esta semana era mucho más importante que las otras), ha pasado un pelín desapercibida la selecció de Kenia para los juegos olímpicos de Londres en la prueba de maratón.

El domingo pasado se celebró la maratón de Londres, una de las más importantes del mundo, y para los kenianos era su trial particular. En ella corrían Wilson Kipsang, que ganó; Patrick Makau, que tiene el récord del mundo; Abel Kirui, doble campeón del mundo; Martin Lel, que ha gando en Londres tres veces y con su reciente segundo puesto ya tiene otros tres segundos; etc. Una semana antes se había corrido en Rotterdam y en Boston; en la primera triumfaron los etíopes pero Moses Mosop se coló en tercera posición; en la segunda, el calor hizo estragos y las marcas fueran flojas, muy flojas.

Con este panorama, no es fácil decidir qué tres maratonianos deben representar a Kenia. Hace cuatro años Kenia consiguió su primera medalla de oro en maratón con Samuel Wanjiru y no querrán que Etiopía, que este año presenta una seria candidatura, les arrebaten el trono. En conclusión, ¿qué atletas deben correr en los juegos?

Makau se queda fuera (foto de Getty, sacada del Daily Mail)




Si en este país se hablara un poco menos de fútbol, el debate estaría servido. Pero la noticia ha pasado sin pena ni gloria; los seleccionados son Wilson Kipsang, Abel Kirui y Moses Mosop. Aquí tenéis el ranking del año 2012, para abrir boca.

martes, 17 de abril de 2012

Caballo blanco

Quizá ya lo sabíais, pues pasó el 31 de marzo, pero yo me he enterado hoy. El que se llamaba Caballo Blanco en el libro "Nacidos para correr", Micah True, murió mientras corría o cuando dejó de hacerlo; después de cuatro días desaparecido, encontraron su cuerpo con los pies en remojo al lado de un arroyo y una botella de agua a su lado, por la zona de Nuevo México.

Yo he leído la necrológica en La Vanguardia de hoy (de Sergio Heredia); aquí tenéis la del día 2 de abril en El País (de Néstor C. Vicente).

martes, 10 de abril de 2012

Competiciones paralelas

En ocasiones una misma carrera tiene varias clasificaciones; es habitual ver que los veteranos se pican entre ellos sin que se estén disputando una plaza de podio en la clasificación general pero sí en su clasificación particular. También suele existir la categoría de primer local y, aunque no sea una categoría oficial, la de "primer blanco". Entre las categorías reales y las inventadas, todos podemos encontrar la manera de leer mejor nuestro resultado. Algo así me pasó en la Zurich Marató de Barcelona.

Sabía que no llegaba en mi mejor momento y hacer 2h26' no sólo me dejaba lejos de mi marca personal sino que además lo confirmaba por completo. Pero... mi resultado también se podía leer desde otra perspectiva.

Por recomendación del departamento de deportes de mi universidad (U. de Barcelona), me apunté a la maratón también como universitario y gané el campeonato de Catalunya de la categoría (aquí la noticia y en el PDF se pueden consultar las clasificaciones). Me hace ilusión este título, pero me desilusiona saber que sólo 27 chicos y 2 chicas universitarios nos apuntamos; supongo que se trató más de desinformación que de falta de corredores.

Y otra manera de leer mi resultado de la maratón de Barcelona fue gracias a Zurich y a la iniciativa que tuvieron de organizar una competición paralela por equipos de tres (masculinos, femeninos o mixtos). A través de la tienda de calzado deportivo ASHI (en carrer Muntaner, 126) me pidieron que formara equipo con dos de sus corredores: Ricardo Esclapez, que se cascó 2h46'18" con unas FiveFingers, y José Rubio, con 2h44'59". Nos llamamos Ashi Running 2 y con un tiempo total de 7h57'52" nos clasificamos en segunda posición. Los ganadores, Cigu Team, terminaron en 7h34'15"; para cada uno de ellos habrá viaje, alojamiento y dorsal para la maratón de Praga del próximo 13 de mayo. Para nosotros, un POLAR RCX5 GPS (que no está nada mal). El cuadro de ganadores y los tiempos finales los podéis consultar aquí.

En fin, que a veces las carreras tienen competiciones paralelas y un resultado a priori no demasiado bueno se ha convertido en una victoria y un segundo puesto (con regalo muy interesante de propina). 

martes, 3 de abril de 2012

Recuperándome de la maratón

La semana posterior a la Zurich Marató de Barcelona ha sido de descanso casi total, es decir, que he descansado durante seis días y he competido en el séptimo, en la Serra de les Fites de La Pobla de Massaluca. 

La Serra de les Fites es una carrera de trail de casi 22kms en la comarca de la Terra Alta, a medio camino entre Tarragona y Fraga. Es una zona árida, perfecta para los olivos y para las viñas. Ideal para una carrera de estas características, pero sigo viendo que no es mi mejor terreno.

Raúl, Ricky y yo en una pasarela del camping.

Tanto a Ricky (os recomiendo también la lectura de su blog sobre esta carrera) como a mí nos invitaron a correr por ser amigos del organizador y montamos un viaje a cinco para pasar un fin de semana diferente en una zona desconocida (para nosotros) de Catalunya. El camping Port-Massaluca, a orillas del río Matarraña, fue nuestro punto de descanso. Llegamos el sábado por la tarde y nos gustó tanto el lugar que nos sentamos en la terraza y dejamos pasar las horas hasta el momento de cenar. Para cenar, los organizadores nos invitaron a su cena en el casal del pueblo: pasta, pan con tomate y embutido, tortilla de patatas, aceitunas, queso... y tartas como postre. Y para beber, vino de la Terra Alta. Lo suficiente para dormir como niños si no fuera porque nosotros somos de costa y nos olvidamos que en un bungalow puede hacer frío por la noche: los cinco tuvimos algún que otro problema para conciliar el sueño.

El domingo el día amaneció muy despejado y bonito. La carrera empezó con ritmo vivo y tanto Ricky como yo pensamos que no era muy sensato seguir a los primeros en esa estampida y que en los momentos menos técnicos ya les pillaríamos. Pero aunque era un circuito "fácil", mis piernas se resentían de la maratón y las de Ricky se defendieron bien en el llano y en las subidas, pero nos fallaban (y nos fallarán siempre) las bajadas. En fin, que fuimos quinto (Ricky) y sexto (yo) pero disfrutamos mucho.

Un momento de emoción durante la carrera (todavía faltaban 6kms)

Al terminar, un merecido bocadillo de butifarra y tanta tarta como se quisiera. Al parecer, todos los habitantes del pueblo hacen tartas en casa para que los atletas repongan fuerzas y... se lo agradezco mucho. Me parece una iniciativa muy buena y una manera interesante de implicar a los habitantes del pueblo. De hecho, hay que tener en cuenta que el pueblo de La Pobla de Massaluca tiene censados unos 300 habitantes y en la carrera hubo 390 inscripciones. 

Después de correr el grupo se partió. Ricky volvió a Canet y yo seguí hasta Pamplona, unos días de vacaciones y el lunes empiezo a entrenar de nuevo.