Ayer se disputó la Mitja Marató de Barcelona y yo participé por tercer año consecutivo, aunque si hacemos un recuento de mis resultados conseguidos podría llegar a la errónea conclusión de que estoy acabado (o acabándome). En 2010 quedé 2º con mi marca personal de 1h04'57"; el año pasado fui 6º con 1h05'45", y ayer quedé 15º con 1h06'22". Pero estoy contento, porque mi estado de forma no es el mismo ni tampoco los objetivos. Este año me he preparado un poco más para el cross y menos para la maratón, así que le media podía verse ligeramente perjudicada. No obstante, no negaré que me habría gustado bajar de 1h06'00"; he aquí esos malditos 22 segundos.
A punto de ser adelantado en el sprint (Foto de Raúl Estévez) |
En las carreras de 10km (o en las de 30, si habéis hecho alguna) es muy fácil de calcular el tiempo final al paso de los múltiples de 5, pero no sucede así en la maratón ni en la media. En cambio, existe otro número útil para estos casos y es el 7. La media maratón se puede dividir en tres tercios de 7kms cada uno pero quedan colgando unos escasos (o no tan escasos) 97 metros hasta la línea de meta.
Tirando del grupo perseguidor y con los ojos cerrados (Foto de Rosa Catalán) |
Ayer pasé el kilómetro siete en 22'08" (creo) y el kilómetro catorce en 44'02". La misma progresión me decía que llegaría al veintiuno en 66'00" (segundo arriba, segundo abajo), pero no así a la línea de meta. Quedaban esos menos de cien metros que suelen suponer unos 20 segundos. Pero tenía a mi favor que me estaba encontrando bien y que el grupo era numeroso, así que seguramente nos picaríamos un poco al final y con el sprint cogería renta para bajar de 1h06'. De hecho, estaba convencido. Pero no me salió. Acabé el último kilómetro en 2'59" y ni con estas. Quizá la próxima vez... Lo que sí puedo decir es que fui muy regular y eso es siempre una buena noticia.