Una de trail

Agosto ha sido un mes de trabajo para mí: mientras las mañanas las pasaba en una clínica de rehabilitación, por las tardes iba al spa a dar masajes; mi cuenta corriente lo agradece, es lógico, pero me ha costado lo mío llegar a fin de mes (físicamente, claro). A todo ello, sumo un rodaje de 8km a las siete de la mañana (cuatro días a la semana) y el entrenamiento de turno por la tarde, ya sea rodaje, series, cuestas o ritmo controlado. En total, unas 10 u 11 sesiones semanales para aumentar el volumen de cara a la maratón de octubre (ya casi confirmado que será en Frankfurt el día 31).

El caso es que para hacer más llevadero este mes tan veraniego, me he animado con el trail-running (algo así como correr por la montaña). En Sant Pol, aunque es "de mar", tenemos casi la obligación de correr montaña arriba si queremos evitar la N-II y con el tiempo a uno acaba por gustarle: suele haber sombra, alguna que otra fuente... Además, desde hace ya varias semanas me habían invitado a la edición de este año de la BURRIAC ATAC y los de ASICS me regalaron unas TRAIL ATTACK 6. Con tanto ataque, lo normal es que me subiera por las laderas.

Será mi primera carrera de montaña y, como tengo una maratón en la cabeza y la carrera de Macedonia a los cuatro días (me han confirmado que se celebra), lo mío sólo será una participación discreta, algo así como un caramelo como premio a este agosto que he pasado. Pero la gente me cuenta que la montaña crea adicción y quizá este primer dorsal sólo sea el primero de muchos muchísimos.

Por otro lado, también querré comentaros cómo me van las zapatillas. En el enlace que os ponía más arriba, algunos usuarios hablan de falta de calidad en la zona del talón, que con muy pocos kilómetros se empieza a despegar. Yo las he llevado por ahora unos 50km y están como nuevas (también es verdad que no soy un kamikaze bajando).

PD: Y por si fuera poco, la carrera es nocturna.