lunes, 5 de noviembre de 2007

Losheim

Este fin de semana he ido con mis compañeros de residencia a Losheim. Según mi hermano Enric, no puedo decir los de casa ya que acarrea connotaciones que no me corresponden*.

Losheim es un pequeño pueblo de Alemania, aunque no siempre ha sido así. Su cercanía a la frontera con Bélgica ha permitido jugar a ping-pong con él. En un principio era un pueblo belga, pero en 1921 pasó a ser alemán. Acabada la segunda Guerra Mundial, en 1949, se decretó que era belga de nuevo; pero finalmente (¿o debo decir "por ahora"?), en 1958, quedó establecido que el pueblo era Alemán.

El pueblo es tan pequeño que me resultó imposible encontrar cualquier información en Internet. Al parecer hay otro Losheim más importante (Losheim am See), pero no es el mío. El mío está habitado por 340 personas, la mayoría de ellos granjeros.

Su altitud es de 567m, pero sus ondulaciones con pronunciadas. Después de 2 meses en Holanda, aquello parecen los Pirineos; y no puede reprimir la tentación de salir a correr por sus caminos.
El sábado pasamos el día en Luxemburgo y luego visitamos un castillo en Bélgica. Por lo tanto, la mañana del domingo, mientras los demás todavía dormían, me levanté sigilosamente para ir a explorar los contornos.
En seguida encontré un camino sugerente y me uní a él. Tortuosamente pasamos entre granjas, prados llenos de vacas, bosques frondosos com nunca había visto... Mis ansias de explorador no me permitían desandar el camino recorrido y eso me hizo acaban andando más que corriendo algún tramo. Lo que en un principio era un camino con un riachuelo acabó tornándose un río sin camino.

El reloj empezaba a avanzar peligrosamente cuando me di cuenta que no sabía el nombre de mi pueblo. Pero quiso la providencia echarme una mano y, después de girar una esquina, reconocí el pueblo vecino que antes había cruzado, aunque por otro lado. Me explico.

Al salir de Losheim y recorrer un buen tramo de camino de carro, crucé un pueblo en forma de T (un pueblo que tenía 2 calles). Entré por la base de la T y tomé la extensión de la derecha. Un rato más tarde, me di cuenta de que esaba de nuevo en el pueblo, aunque había llegado a él por la calle de la izquierda. Encarrilé el mástil de la T y llegué a casa justo cuando los más madrugadores se estaban desperezando.
Qué lastima que la cosa acabara allí y no pudiera descubrir nuevos caminos. Otra vez será.

* La riqueza del español no deja de sorprenderme. Al parecer, el verbo atañer sólo existe en las formas no personales y en la 3 persona. Me encanta; sirve para quitarse las obligaciones o similares de encima. No puedo decir "esto me atañe"; es incorrecto. Pero si puedo decir esto les atañe a ellos. Sin comentarios.

11 comentarios:

María dijo...

ey! yo corro en la sierra de madrid (bueno, llevo corriendo dos dias) y la verdad es que el aire asi se agradece ¿verdad? estoy descubriendo lo bien que viene perderse de vez en cuando por caminillos asi... como el tuyo!. ¡¡¡qué envidia de pueblo!!! Una escapada genial no?

Marc Roig Tió dijo...

Hola María.
Caminos así hay por todo el mundo y descubrirlos es un placer difícil de alcanzar por otros medios. Ya veo que estás cogiéndole el gustillo, aunque no resulta difícil en la Sierra de Madrid. Durante los 6 años que estuve en la capital me limité a recorrer la Casa de Campo, que no está nada mal, pero no es equiparable a la Sierra. Si vuelvo algún día por allí ya te avisaré para que me enseñes los caminos que has ido trazando.

Y realmente el pueblo no tenía desperdicio. Si uno busca tranquilidad sé dónde puede encontrarla, jeje.

mòmo dijo...

Empiezas a darme envidia, hermanito... Bueno, menos en lo de correr, ahí sí que no te acompaño. Pero ese camino con riachuelo que se transforma en río sin camino, un pueblo con forma de T, montes, prados, bosques, granjas... Nos veremos. Ya vendré (con Joana, of course).

Marc Roig Tió dijo...

Seréis bienvenidas, Mòmo. Aunque esta escapada queda un poco lejos de Amsterdam. En kms, 311. En horas -no consigo entender por qué- casi 5.

Al parecer el GPS que llevaba el coche estaba más perdido qué nosotros. No sabes la impotencia que sientes al ver que un GPS se equivoca una vez sí y otra también.

am dijo...

Debe ser un pueblo precioso, con las costumbres belgas y alemanas bien mezcladas. El sábado intenté correr, a los dos minutos ya casi me arrastraba, jaja, pero fue divertido, me recordó cuando iba en la escuela y me elegían para las competencias de atletismo, pero cómo pasan los años! jaja.

Saludos!

Anónimo 2 dijo...

Marc: ¡tocado y hundido! Qué burro soy y qué paleto parezco! Muchísimas gracias por tu comentario y por hacerme reír al empezar el día!

Marc Roig Tió dijo...

am, todo es proponérselo y empezar (poco a poco, por supuesto). Veo que el tema de correr está calando un poquillo en la red, excepto en mi hermana que ahí no cambiará.

Anónimo 2, es bueno que nos corrijamos y más aún si una corrección te da la risa. ¡Ojalá todas fueran tan fáciles de aceptar!

María dijo...

jajajaja marc vamos a poner a correr al mundo entero!! jajajaja

cuéntanos más cosas!!

Marc Roig Tió dijo...

Yo me apunto a que la gente se apunte. ¿Quién más se apunta a correr?

Anónimo dijo...

hola, soy bote , espero q te vaya muy bien , simpre supe eras un tio de mundo .Ojala se pusiera toda la gente a correr , como en la peli de forest . un saludo.

Marc Roig Tió dijo...

Hola Bote, encantado de tener noticias tuyas. A ver qué tal te va la temporada y espero verte en algún que otro cross.