martes, 10 de febrero de 2009

Matatu

El matatu es el medio de transporte en Kenya. Su nombre deriba del kiswahili "ma tatu" que significa "por tres" [shelings]. Ahora es un pelin mas caro, pero sigue siendo igual de intenso. Desde los viajes cortos, a 10 shelings, hasta los servicios de largo recorrido (Nairobi-Eldoret, por ejemplo) de unos 500 shelings, las variedades son inmensas y los riesgos, infinitos. Para hacer una breve descripcion, los matatus son furgonetas de 5 filas de asientos, con solo una puerta lateral para las 4 ultimas filas.


Una vez superado el miedo inicial, se descubre que el matatu es una herramiento muy util y eficaz. Las rutas estan estipuladas de antemano (como los autobuses interurbanos) pero no asi su horario ni el numero de paradas. Si coges el matatu al inicio del recorrido, este no arrancara hasta haber llenado, por lo menos, todos los asientos. Si lo coges durante el recorrido... solo tienes que entrar y buscar un hueco.

En la puerta del matatu, pintada, aparece la capacidad permitida: 14 pasajeros. Al igual que los semaforos en rojo en Italia, solo es una sujerencia. Como muestra la foto -yo estaba en la ultima fila- puede caber mucha mas gente. En el trayecto de Iten a Eldoret (30kms, 80KSh), despues de hacer paradas cada menos de 1000m., llegue a contar en una ocasion 21 cabezas y creo que eramos mas, porque habia ninyos a los que no veia.

Pero lo mas atractivo del matatu es, sin duda, sus revisores. Mientras estan aparcados, instan a la gente a que se suba (aunque sea gente que no tenga ningun interes en hacer el viaje). Luego, colgados como monos de la puerta corredera, intercambian funciones de cobrar billetes -y devolver el cambio- con ojear la calle para captar nuevos inquilinos. Por si fuera poco, la musica en los matatus suele ser ensordecedora (algunos incluso tienen una tele que proyecta videoclips) por lo que los revisores han desarrollado un sistema de comunicacion con el conductor muy efectivo: aporrear la chapa de la furgoneta. Si el matatu esta en marcha, significa que pare a recoger o dejar alguien; si el matatu esta parado, significa que ya puede arrancar.

Y con tanto parar y arrancar, ademas de todos los baches que tiene Kenia, lo normal es que la puerta no cierre bien, pero quien le mira el dentado a un caballo regalado?

11 comentarios:

Rafael dijo...

Jajajjajaja,como sardinas enlatadas,ya me lo estoy imaginando,ademas de verlo a traves de la foto.Desde luego que te estas empapando del dia a dia de aquellas tierras.Seguro que te miran raro,diran que hace este blanquito aqui???.
Un saludo.

Víctor dijo...

madre mia....como para tener un poco de claustrofobia...

me está gustando como narras esta aventura, sigue con ello,...y disfruta lo que queda.

saludos

del porvenir dijo...

De los olores del matatu no cuentes nada, que mejor nos limitamos a imaginarlo.

Cipri dijo...

Igualito... igualito que en Bolivia...

mòmo dijo...

Eso, exactamente, es una combi en Perú. Incluidos los revisores, que han desarrollado una jerga peculiar y particular, un modo supercalifragilísticoespialidoso de vociferar -que no vocalizar- las paradas oficiales del recorrido.

Anónimo dijo...

Muy bueno, Marc. Tus comentaristas confirman la universalidad del invento. Yo también me apunto: viajé así en Yibuti, cuatro horas por el desierto a 45 grados, y no veas qué tufarada a sobaco se respiraba. Salvo un par de bajones de tensión y varios amagos de choque mortal en curvas sin visibilidad, todo fue divertido.

Sigue con estas crónicas, que están muy bien.

Marc Roig Tió dijo...

Segun parece, el matatu es mas internacional que la cocacola, jeje. Hace falta decir que no lo explique todo en la primera entrada; me he guardado unos detalles (y una foto que todavia no he sacado) para la entrada "matatu 2".

Bloody Marie dijo...

Sí sí, en Nicaragua también los tienen. Recuerdo que, en uno de los que tomamos, accidentalmente se nos cayó el pequeño monedero donde llevábamos el dinero del bote de nuestro pequeño grupo de 4. No nos dimos cuenta hasta que lo necesitamos más tarde. "Maldición! Hemos perdido el monedero y, con él, parte del poco dinero que teníamos". Pero la sorpresa fue cuando, un par de días más tarde, un chiquillo nos vio por la calle y empezó a correr detrás de nosotros armando gran jaleo. Nos giramos y nuestra sorpresa fue ver corría hacia nosotros agitando el brazo con algo en la mano. Era nuestro monedero! Cuando nos alcanzó nos dijo que creía que era nuestro, que lo encontró en el "matatu"-combi-minibus-furgoneta de la que él era el revisor. No sé cómo será en los otros sitios, pero en Nicaragua los revisores, o auxiliares del conductor, suelen ser chiquillos de no más de quince años. Tanto nos sorprendió y agradó su honestidad que le dimos una propina exagerada. Así, fin del cuento y todos más que contentos!

Jose (Jambo Mondo) dijo...

Disfruta de la experiencia Marc. Yo echo de menos los matatus, es meterte de lleno en la vida de la gente de allí.

María dijo...

¿¿¿estás en Kenia???? que bonito!!! yo estuve cuando volvi de Burundi, fuimos a ver a las Hermanas de la caridad (las de la Madre Teresa) en aquel "barrio" (que es tan grande como una ciudad) que está a las afueras tan pobre.... no me acuerdo del nombre. Estuvimos un rato allí y luego nos fuimos a cenar al Carnivore como premio por todo lo que habíamos hecho durante todo el mes. ¿has ido? es muy divertido, cada dia de la semana sirven una carne exótica diferente.

¿a que los keniatas son buena gente? lo de los matatus es divertidisimo!!! que envidia me estas dando!!! quiero volver a africa!!!!

Marc Roig Tió dijo...

Bloody, que detalle el del revisor. Aqui no son ninyos y no creo que fueran tan legales, jeje.

Jose, seguro que yo tambien acabo por echarlos de menos.

Maria, no he pasado por el Carnivore, pero me han hablado de el. La verdad es que la carne en Kenia no me atrae mucho... Y si, los kenianos son muy buena gente.