lunes, 13 de diciembre de 2010

No se puede ser más claro

Furacán me comenta un blog que no conocía y, concretamente, una entrada que explica con pelos y señales el tema del dopaje sanguíneo. Es largo, pero merece la pena coger un par de madalenas y empezar a leer (lo de las madalenas es para acordarnos de cerrar la boca de vez en cuando).

Aquí está la clase magistral de Jordan Santos.

PD: Y pensar que Eufemiano es ginecólogo...

5 comentarios:

Rafa González dijo...

Yo lo leí y me pareció muy esclarecedor. Además a los profanos nos resulta sencillo de entender. Yo aluciné con lo de las diferencias entre un atleta dopado o no dopado.

Gerar dijo...

Bien contado, solo nos falta saber como funciona la mente de un atleta que de pronto tiene un 5% más de gasolina.

Ferran dijo...

M'ho miro però aquest cap de setmana pensava en les dones que van a la consulta d'Eufemiano...

JordanSantos dijo...

Descubro sorprendido que uno de los blogs que más suelo visitar (tus aventuras son adictivas) ha enlazado mi entrada sobre el dopaje...

Todo un honor! Muchas gracias!!

Marc Roig Tió dijo...

Jordan, el honor es mío. Saber que te tengo como lector (¡¡¡y adicto!!!). Algún día tenemos que coincidir y hablar con más calma, que a mí también me gusta mucho la fisiología del esfuerzo (aunque más aplicada a la recuperación y prevención de lesiones) y con el tiempo, tengo intención de doctorarme.